domingo, 1 de febrero de 2009

Hasta 250 litros más de leche, o la importancia de poner nombre a una vaca, ellas al igual que los humanos responden mejor a un tratamiento personal

Hasta 250 litros más de leche, o la importancia de poner nombre a una vaca, ellas al igual que los humanos responden mejor a un tratamiento personal

Las vacas también responden mejor a un tratamiento personal. Así lo asegura un equipo de científicos de la Universidad de Newcastle. Se puede incrementar su producción de leche en más de 235 litros. Las vacas también se sienten más felices y relajadas si se las da una atención más personalizada. Poner nombre a cada vaca de un rebaño podría parecer una locura. Pero un equipo de científicos de la Universidad de Newcastle ha demostrado que esta práctica aumenta la producción de leche sin ningún coste adicional. Y es que según el estudio, cuando se trata a una vaca de manera particular y se la llama con su propio nombre, se puede incrementar su producción de leche en más de 235 litros anualmente, además de mejorar su bienestar y su percepción con respecto a los seres humanos. Nuestro estudio demuestra lo que buenos agricultores llevan pensando desde hace tiempo "Al igual que los humanos respondemos mejor a un tratamiento personal, las vacas también se sienten más felices y relajadas si se las da una atención más personalizada", explica la doctora Catherine Douglas, autora del estudio y miembro del School of Agriculture, Food an Rural Development de la Universidad de Newcastle. "Nuestro estudio demuestra lo que buenos agricultores llevan pensando desde hace tiempo", añade. El estudio, publicado en 'Anthrozoos' y recogido por otr/press, encontró que las granjas donde a cada vaca se le llama por su nombre, la producción de la leche en conjunto fue mayor que en las granjas donde los animales fueron tratados en grupo. Mejor temperamento al ser ordeñadas se examinó las actitudes de los agricultores respecto a la producción de la leche y sus influencias en las vacas. Preguntaron a 516 productores de leche británicos sobre cómo, a su juicio, los seres humanos podían afectar en la productividad, el comportamiento y el bienestar del ganado lechero. Casi la mitad (46%) aseguró que la mejor medida era llamar a cada vaca con un nombre propio. Los que habían puesto en marcha esta recomendación habían aumentado el rendimiento de cada animal en 258 litros anuales. Además, el 66% de los agricultores aseguró "conocer todas las vacas de su rebaño" y el 48% se mostró de acuerdo en que un contacto humano con los animales generan vacas con un mejor temperamento a la hora de ser ordeñadas. "Al conceder más importancia a cada animal, llamándole por su nombre o interactuando con él, no sólo mejoramos su bienestar y su percepción con respecto a los seres humanos sino que también aumentamos su producción de leche sin ningún coste adicional", explican los investigadores.

Hasta 250 litros mas de leche, la importancia de poner nombre a una vaca, ellas al igual que los humanos responden mejor a un tratamiento personal